MILLONES DE BOLIVIANOS ANUNCIAN QUE EL 17 DE AGOSTO SE SUICIDARÁN EN MASA
Una secta de fanáticos ha convencido a los bolivianos de que la mejor opción para el país es el suicidio. Unos no irán a votar, otros votarán nulo, otros votarán por unos tipos que nos dijeron en la cara que venderán la casa de la abuela, que también venderán el auto, la moto, el triciclo de la niña y que además venderán en la feria 16 de julio al perro y al gato.
7/29/20251 min read


MILLONES DE BOLIVIANOS ANUNCIAN QUE EL 17 DE AGOSTO SE SUICIDARÁN EN MASA
Una secta de fanáticos ha convencido a los bolivianos de que la mejor opción para el país es el suicidio. Unos no irán a votar, otros votarán nulo, otros votarán por unos tipos que nos dijeron en la cara que venderán la casa de la abuela, que también venderán el auto, la moto, el triciclo de la niña y que además venderán en la feria 16 de julio al perro y al gato.
Que cada quien se dispare en el pie como mejor le cante.
También están los que, a dos semanas de las elecciones, gritan en coro que las mujeres restan votos. Entre ellos hay una dama de fina lengua y atuendos estrafalarios que, acompañada de unos sujetos de sombrero y casco, grita con todos los dientes “con las mujeres no hay futuro”.
Miles, millones de bolivianos se lanzan sonriendo al precipicio.
Votar por el insecticida.
Cuenta una fábula que, debido a un capricho, una diminuta enemistad entre la hormiga y la cucaracha, esta última decidió votar por el insecticida. Murieron todos, incluso el grillo que había decidido votar nulo, esta vieja fábula también podría ejemplificar lo que está a punto de sucedernos.
Atacamos al diferente, como si fuera el enemigo, decía Mario Benedetti. El enemigo son las logias que quisieron dividir el país, que cada día aparecen en la tele a decirnos en la cara que lo venderán todo, ellos que jamás construyeron una escuelita.
Adelanté, el voto es libre, vote por el insecticida, pero cuando la policía voltee la puerta de su casa y no haya un peso para comprar la mitad de un pan, tenga el valor de admitir que la cagó. Que nos cagó a todos.
Opinión: bolivia24.com